jueves, 2 de julio de 2020

De mujer a DIOSA


La vida es una constante, días buenos y otros que son aleccionadores pero nunca serán iguales, por lo que cuando sientas que tu vida se volvió rutinaria, recuerda que siempre tendrás dos opciones: Mantenerte encerrada en tu concha o avanzar para redescubrir tu magnificencia.

En el camino de la vida, como le digo al crecer, lo rico es tener la conciencia en el hoy para disfrutar las cosas por aprender, hacer, leer o sentir dejando el miedo atrás.  

Por eso el descubrir “Qué más tiene la vida para mi” es en parte el verdadero elixir de la juventud al reconocer tu energía y conectarte a tu Ser desde lo divino, entendiendo esto como el plan que Dios tiene para ti desde tu esencia, tu SER, tu amor propio.


NO ESPERES EN VANO

Como hombre he conocido y aprendido de mujeres y DIOSAS, estas últimas tienen el poder de sanar nuestras heridas, acompañarnos en el camino para ser mejores hombres, curando al niño herido que arrastramos, que llevamos a la juventud y luego a la etapa adulta donde nos topamos una y otra vez con la misma piedra = Pasado sin sanar.

No tienes que esperar, acepta que tienes toda la capacidad de convertirte en una Diosa y Ser feliz con un Ser que te apoye y elija crecer a tu lado = Cultivarse juntos en el amor.   Esto no depende de mí, de tu madre (Aunque debes sanar primero tu pasado con ella) o de tu actual relación; esta responsabilidad es única y exclusivamente tuya, de tu valentía o las acciones que tomes para SER una Diosa.

Como lo he escrito anteriormente, somos DOS en UNO, esto es un constante ir y venir en el rol que recibimos, pero respetar tu rol femenino es importante y para esto, acá algunas conclusiones a las que he llegado, luego de estudiarlas y aprender de ustedes en este interesante camino, sabiendo que aun me falta mucho por aprender.


TOP SIX DE LA DIOSA SABIA

NO es ser sumisa:  La Diosa es inteligente y no discute, por el contrario, observa y conoce a los hombres desde su esencia; ella sabe que nosotros respondemos una pregunta a la vez, por ende, no mezcles temas.  Uno a la vez y cerrado el tema, avanza, no lo uses como haz bajo la manga “Sí, igualito que la vez pasada” eso es pasado, no tiene validez en el HOY.

Juez o Diosa: Se vale preguntar, pero cuando se empieza con la cantaleta y el reclamo sin sentido, el hombre tiene la habilidad de desconectar el oído y sus respuestas son monosilábicas.  Si, aja, ummm… Y de ahí viene el siguiente reclamo “Es que tu no me escuchas” ¿Qué parte de todooo lo que le dijiste quieres que recuerde?  Se concisa y precisa.

Queremos una Diosa, no una jefa: Mi madre dejó de darme ordenes hace muchos años, no necesito que seas mi madre.   Cuando hay confianza y no nos juzgan, sólitos contamos nuestros pesares o problemas y tal vez tu no tengas la solución, pero sentir tu apoyo, más que los mismos reclamos de siempre nos ayuda a encontrar soluciones, no a pensar en los problemas.

El sexo es salud:  En una relación cuando no hay intimidad, se convierte en hermandad; literal es como si vivieras con tu hermano y que hacen los hermanos, pelean como niños.

La cama es el templo sagrado donde la ENERGÍA del placer y el descanso se funden = Salud.   No te quejes si antes de intimar nos hacen esperar el protocolo de su majestad: Que el blower no se arruine, que los niños se duerman, apaga la luz, no me toques las llantitas, etc.  La mejor expresión del verdadero amor es la intimidad cómplice, aquella donde ambos disfrutan en la libertad del sentir pleno, sin culpas, superando el tabú de que eso no me gusta.    Si a ti no te gusta, seguro a una Diosa si le gustará.

En las dificultades económicas:  Cuando uno de los pilares de la relación es el dinero, no cabe duda que el interés sale a flote en las crisis; es así como se prueba el verdadero amor y es en esos momentos cuando más apoyo se deben dar o recibir, basando éste en la certeza que vendrán mejores días, ya que como dijo la abuela “Todo pasa menos las…”

La comunicación es amor, no el silencio: Se piensa que el hombre no expresa sentimientos, por el contrario, somos más llorones que ustedes, pero para que el corazón de un hombre se habrá a expresar lo que realmente siente, no hacen falta besos o intimidad, solo necesitamos un corazón que vibre en nuestra misma frecuencia.   Habla despacio, guía sus pasos para que sane su pasado y para esto debes cultivarte.   No pretendas hacer una cirugía a corazón abierto, sin al menos leer un folleto de primeros auxilios.     Recuerda: Una Diosa sana en la luz, las mujeres comunes nos llevan a la oscuridad.   

 

DESCUBRE TU LUZ Y EMPIEZA A BRILLAR.

Ya sea que estés sola o con pareja, tu misión divina es crecer para encontrar la PAZ y ser feliz tú antes que nadie más; sana tu pasado, perdona a quien tengas que perdonar y cultívate desde adentro para encontrar o crecer con ese ser que Dios puso o pondrá en tu camino.   Como bien lo dijo Bob Marley en su canción Could you be loved - Puedes ser amando” y la respuesta es sí, sí mereces ser amada, amada desde el amor no desde la posesión, tú no eres un mueble, eres una DIOSA y mereces un SER para que se acompañen en la Luz encontrando y cultivando juntos la paz.

No tengas miedo a pensar o decir que eres una DIOSA, pero recuerda que tu misión es ayudar a los demás a crecer, ya sea tu pareja, tus hijos, amistades o hasta tus padres, pero antes de esto cultívate y crece desde dentro, para así dejar en el pasado a esa mujer que fuiste y convertirte en la DIOSA que llevas por dentro.

Abdiel Barranco C.

Gracias a las mujeres que me enseñaron el camino, para conocer a verdaderas Diosas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario