“Coño, si antes de casarme me hubiesen dicho todo sobre el matrimonio…” Esto lo he escuchado de hombre y mujeres por igual, dado que en confianza y con las preguntas correctas, solemos decir lo que realmente sentimos, de todo aquello que nos ha marcado en la vida y bueno, el matrimonio también está dentro de esas importantes experiencias, que conforman el vivir.
Afortunadamente, luego del enamoramiento = En Amor
Miento (Disfrazarnos de gente buena y maravillosa), relaciones fallidas
y en algunos casos, uno o dos divorcios; es de esperar que haya cierto nivel de Aprendizaje, luego de detenernos a reflexionar, antes de volver a meter la
pata, por una o varias lecciones no aprendidas.
Pero bueno, asumamos que efectivamente hicimos el
trabajo de introspección necesaria, sin culpar a nadie, aceptando nuestros
errores y aciertos, así como perdonando desde la consciencia y el corazón, el
actuar de esa otra persona y hasta el nuestro; ahí, al rozar los 50 años o
puede que unos más, es cuando probablemente se inicie esa etapa de plenitud, ya
que, con los años el cuero se curte, la consciencia se afina y aprendemos a superar
el pasado.
SALIENDO DEL OSCURANTISMO
Una vez superadas las mentiras, cuentos de Hadas y Príncipes
Azules, se entra en un proceso de introspección (Mirar hacia adentro), en donde
es ideal preguntarnos:
¿Qué es para mí Amarme?
– Aquí OLVIDATE de lo que esperas
del otro – Es entrar en nuestros sentimientos, sin volver a la constructo social o ideales repetidos… Algunos
ejemplos de respuestas pueden ser:
A- Hacer acopio de mi Libertad, para realizar aquello que nunca hice por mí.
B- Compartirme en Libertad, desde mi pasión por la vida y VIVIENDO en Paz.
C- Impedir que nadie me venga a joder, ni yo joder a nadie.
D- Aprender, Entender y Aceptar mis virtudes y defectos.
E- Atreverme a VIVIR en soledad, aprendiendo más de mí que nunca.
Cada una de estas posibilidades (O la suma de todas)
y seguro muchas más, son parte de ese deseable caminar, que nos permite superar
la dependencia o creencias de todo aquello que enmarcó nuestro contexto de vida
(La cerca, encierro o caja mental que nos montamos en la mente)
para así darle VALOR al HONRAR nuestra Esencia y Sentir; lo que verdaderamente somos,
sentimos y deseamos.
HAGASE LA LUZ
La opción que tomes para ti será el norte que marcará
tu futuro, por lo que, dejando los miedos a un lado, el observar y SENTIR,
antes que el juzgar o etiquetar, serán tu nueva tónica que te llevará a
conectar con las demás personas (Una vez cambias tu actitud, TODO cambia)
no desde lo que ves, sino desde aquello que empiezas a SENTIR y no hablo de maripositas en la pansa,
esto es serio.
SENTIR, es una
especie de conexión que poco tiene que ver con lo físico, económico, social,
religioso o circunstancial, es como cuando haces algo bien y te cubre esa
sensación de satisfacción por el logro, que te llena por completo… Bueno, cuando estamos en ese estado, ese
otro SER se conecta a tu vibración, a tu energía, a tu Sentir, ya que no VEMOS a
la persona (Estuche) más bien se SIENTE al Ser = Su Alma.
Y ahí es como se hace la Luz, esa chispa de vida,
por lo que aterrizas en el hecho, de que ese Ser te agrada, aunque no cumpla
con tus viejos parámetros físicos, económicos, de educación o todo aquel menú
de “La persona perfecta” y oh sorpresa, puede ser cualquier
persona, ya sea de otra religión, raza, creencias, edad, cultura, ideología o lo que
sea. Aunque al llegar a este nivel de consciencia,
por lo general, ya se han superado muchos dogmas, cambiando el "qué somos" o el "Esto para dónde va" por el DISFRUTO tu compañía y me siento en paz estando o no a tu lado.
DESCUBRIENDO LA PLENITUD
Una vez se Entiende y Acepta qué es y cómo se Siente esa conexión, los
mitos del pasado PUEDEN atacarte, pero al tener las herramientas emocionales actualizadas
y con el ego bien gestionado, se empieza a fluir en Libertad, en eso que yo
llamo La Aventura de VIVIR, por lo que la opinión de los
demás, te vale un carajo. El reprimirte al creer que eso es incorrecto,
sencillamente desaparece. El hacer todo
de manera mecánica y al apuro, ya no tiene sentido y, sobre todo, el querer
quedar bien con esa persona, tratando solo de satisfacerle, SIN satisfacerte a
ti; esto deja de ser un trauma, ya que la prioridad eres tú, así como para la
otra persona, su prioridad es su SER y satisfacción, por lo que ahí, es cuando
con RESPONSABILIDAD, ambas Almas, descubren que el Amar es una dar y recibir, sin
exigencias o imposiciones – El verdadero Amor, no debe, ni tiene… Sencillamente ES y da, sin miedo a recibir.
Esto cambia la dinámica del compartir completamente,
por lo que se empieza a tener conversaciones sinceras, profundas y fluidas de cualquier
tema, haciendo de ese COMPARTIR, un acto o momento de AMOR pleno, donde
hay tanto o más placer en la experiencia (El aquí y el ahora) que, en la
misma intimidad, ya que TODO evoluciona desde un sentirse de Paz y Tranquilidad
tan íntimo, como jamás lo habías vivido.
Ahí te das cuenta, de manera consciente, que has
evolucionado y crecido un montón e interiormente sientes PAZ, estando en
soledad o con esa persona, con la cual estas empezando a compartir desde el
Amor Incondicional… Y la verdad, desde
mi propia experiencia, te diré que esta sensación NO TIENE COMPARACIÓN.
A ver, no trato de venderte una fantasía y puede que hasta no me creas; está bien, pero ¿Cómo saber si esto es posible o no, si no lo experimentas por ti mismo?
Por ende, si ya rozas los 50 años o soplas más velitas, que tienes que perder a estas alturas del partido?
Te da miedo que papá o mamá te regañen… Joder, la VIDA es hoy, no la suma de lo que
digan los demás o te repita tu ego una y otra vez.
Solo por eso, te digo que SÍ es posible, AMAR después
de los 50´s.
Paz y Amor
Abdiel Barranco C.
Guía Emocional
La Aventura de VIVIR
PD: Y tú ¿Crees que es posible para ti
o ya colgaste los guantes?

Precisamente creo que es hora de colgar los guantes después de algunas travesías simplemente creo no hay quien quiera vivir en esa libertad qué yo siento que poseo, aun hay muchaa circunstancias a pesar de la madurez en q se supone nos da esta edad de los 50s, y cuando estaba en la creencia q hoy por hoy sería tan fácil empezar a amar otravez, zas, la vida me dice ahí no es (otravez).
ResponderEliminarPues a esta edad (< 50's) ya no es buscar, sino saber discernir lo que llega a tí, que beneficio emocional te da, ¿ayuda a tu crecimiento como individuo? pensar que "no somos islas", que habrá muchos momentos en los que tu alma necesita compartir su ffrustración o felicidad, es ahí donde nos ponemos críticos de lo que queremos ser en la vida y como queremos vivirla
ResponderEliminarMe enamoré luego de 15 años de ser viuda, después de conocer muchos hombres, pero ninguno q despertara un amor correspondido. Mi alma sabe amar, yo me decía, pero no encontraba un amor q valiera la pena, porq a mi edad se ama con el corazón sin menospreciar la cabeza. Entonces me enamoré a los 62, pero el era legalmente casado, me voltíe y le di la espalda, a pesar de que me rogó que me quedara, q en meses disolvería legalmente su matrimonio. Lo sufrí y lo lloré como no pensaba que sufriría un amor jamás. Antes de q pasara el año, el se puso ante mi y me juro amor como un hombre libre y desde ese momento somos pareja. Cuatro años luego nos casamos y en par de meses celebráremos nuestro 1er aniversario!!!
ResponderEliminarSi creo, estoy a un paso de los 50, en la mitad de la vida (para mi la mejor mitad, porque ya me conozco mejor) claro que es posible amarse, amar y compartirlo con alguien especial. Veo much@s conocidos colgando guantes, que mejor solo y lo entiendo, pero tambien es valido encontrar y ser se alguien con el que estar bien acompañado en este camino de la vida.
ResponderEliminarEl amor y yo andamos juntos desde siempre y quizá por ello desde niña he muy enamoradiza jiji. Comenzando con aquellos amores platónicos y permitía dar rienda suelta a todas las fantasías, propias de cada edad.
ResponderEliminarAsí fui evolucionando y muchas veces confundí el amor y en el amor me confundí; pero siempre apuesto por él. No concibo vida sin amor; a mí, a la familia, la pareja, los amigos, a la vida en sí.
Eso ha crecido con los años, por lo tanto a mis 50, está el amor en todo su esplendor