domingo, 28 de febrero de 2021

LA BLANCA HABITACIÓN

 


Todos en algún momento de la vida nos debemos preguntar: ¿Esta es la vida que yo QUIERO vivir?   La mayoría estudia para tener un trabajo en una empresa donde nos exigen cosas para las que no estudiamos, por lo que esperan de nosotros acciones o actitudes que nadie nos explicó y aun así, seguimos llenando carpetas con certificados de papel o digitales, que certifican que somos humano “aptos” para “X” o “Y”, pero con todo ese conocimiento, seguimos siendo incapaces de dar un abrazo, decir lo que realmente sentimos o detenernos a meditar y pedir perdón.

Y así vamos por la vida, sin aceptar que, en la imperfección y las diferencias, es donde radica la belleza de la vida.  Por esto me invente mi propio estudio sociológico, para ahondar mas en la vida, esa que vemos en los escritores o Youtubers famosos, también en los cada vez más reconocidos Nómadas Digitales o como algunos varios que conozco, ciudadanos del mundo.

Describir la vida y que todos estemos de acuerdo, es como exigir que todos nos volveremos veganos, por lo que me invente para este estudio, una analogía con la que tratare de explicarte mi versión, de eso que viene después del nacimiento y antes de la trascendencia física, eso que llamamos VIDA.


EL EXPERIMENTO

IMAGINA una habitación completamente blanca (Paredes, piso y techos); en ella solo hay una puerta y tu estas adentro.    Contigo están tus padres y hermanos, si los tienes, así como el resto de tu familia; también tus amigos, los políticos de turno, los del pasado y los que se van a postular; tus jefes, el sacerdote, las monjas o el pastor de tu iglesia; muchos de tus compañeros de trabajo y aquellos que llamas ciudadanos de tu país.

En esas blancas paredes hay una sola fuente de luz, un televisor, una radio y la última Tablet con todas las aplicaciones que usas (Todas encendidas y funcionando a todo volumen); también una mesa con lo que acostumbras comer, ya sean enlatados, alimentos con azúcar y harinas procesadas, sal y leche; licores, vicios y como broche de oro, un virus que nadie puede ver, oler o sentir.

¿Te suena conocida esa habitación?

Bien, desde que nacimos ese es el único entorno que conocemos y desde un inicio nos dijeron “Aquí las cosas son así o asa” por lo que obedientemente o por conveniencia, dijimos “Ok, ya que así son las cosas, digan que tan alto hay que saltar y lo hare” lo cual no está bien, ni mal, es solo la fuerza de la costumbre.

 

UN DÍA TODO CAMBIO

Como en todo estudio, hay cosas impredecibles, ya que somos DIFERENTES, por lo que uno de los que estaba en aquella blanca habitación, empezó a cuestionar “Por qué no podemos salir” y todos le respondían “Si aquí estamos bien ¿Por qué quieres salir?”  este personaje a quien llamaremos “Juan Pérez”, con lo años no estaba convencido de la misma respuesta, ya que en el fondo sentía que fuera de las paredes había algo más, que todo aquello que le estaba permitido ver, pensar, escuchar e inclusive sentir.   

Así fue como Juan empezó su búsqueda, ya que en la iglesia, la familia, escuela o en buena parte de la sociedad, seguía encontrando las mismas respuesta (Así son las cosas), hasta que un día pensó “Será que las respuestas a mis preguntas, están dentro de mi” y así fue como empezó a contactar dentro de esa habitación, con personas que tenían un brillo particular, eran SERES que siempre estaban de buen humor, que le aconsejaban y decían “Ahí esta el camino, pero eres tu quien tienes que salir de aquí” y así Juan empezó a desprender ladrillos, abriendo un boquete en una de las blancas paredes.

Desde que el tumbo el primer ladrillo, TODOS le gritaban “Juan estas loco, que haces” pero con la certeza que estaba haciendo lo que su recién despierta alma le decía, Juan derribo una gran pared de mentiras y atravesó el umbral del miedo y sus aletargados pasos fueron tomando velocidad hasta que empezó a correr.

 

EL DESPERTAR

Sin darse cuenta, Juan empezó a sentir su corazón latir con fuerza, su salud empezó a mejorar y se dio cuenta que fuera de aquella blanca habitación, había otras personas, que al igual que él, irradiaban un brillo maravilloso, por lo que pensó “será que estoy en el cielo, ya que aquí todos brillan” sin darse cuenta, alguien se cruzo en su camino y le dijo “Tranquilo Juan, solo despertaste, todo lo que dejaste atrás, es solo tu vida pasada”; algo temeroso voltio hacia atrás y se percato que los que adentro se quedaron, rápidamente reconstruyeron la pared derribada, tapándola con duras críticas de cemento, piedras de incomprensión y barras de miedo, mucho miedo; sorprendido, las risas del ego se fueron desvaneciendo.

Y ahora que hago, pregunto Juan, por lo que, con los ojos bien abiertos, sintió una presencia que le respondió “Vivir, ha eso fue que viniste” por lo que solo confía en tu intuición, poco a poco tu tercer ojo se ira abriendo y empezaras a ver el camino, TU CAMINO.   Tranquilo, atraeras a otros seres, que como tu vibran en sintonía contigo, con quienes podrás conversar sin penas, ataduras, te sentirás más sincero, honesto y transparente que nunca, ya que estarás viviendo tu vida, no aquella que te impusieron todos dentro de la blanca habitación.

Pero que pasará con aquellos que no salieron, pregunto Juan, a lo que esa voz en su interior le respondió “Cada uno debe seguir su proceso, tu sigue el tuyo” y así Juan acepto la realidad, ya que no era responsabilidad suya velar por el proceso de los demás; ni el de sus padres, hijos, hermanos o parejas, solo el suyo y así empezó a fluir en Paz y Libertad.

 

SobreVIVÍ

Así se expresó Juan cuando entendió el experimento o como dijo un montañista “En las pruebas más difíciles en las montañas, es donde mas VIVO me he sentido, por lo que sé que he crecido”.

Y sí, en este experimento social/global llamado VIDA, hay muchas leyes, valores, creencias, practicas y gustos, todos ellos válidos, aceptables o razonables, según tu creencia; esa NO ES TU VERDAD, son las paredes de aquella blanca habitación en donde te metieron, aquella en donde no te ofrecieron las herramientas para que:

1-      Puedas ver o sentir las paredes que te encierran.

2-      Aprendas a cuestionar TODO lo que te enseñaron.

3-      SIENTAS lo que realmente vive dentro de ti – Tus respuestas.

4-      Escuches a tu intuición – Alma.

5-      Descubras el verdadero placer de vivir - PAZ.

 

SobreVIVIR es creer en ti, derribando así decenas de años de mentiras, conectándote a lo realmente divino, a ese Dios que no juzga, que no exige, sino por el contrario, el que te llama a su lado para que seas un Dios, una Diosa plenos de sabiduría, para que así cumplas tu misión, cualquier que sea…   Ese eres tú, esa es tu vida, VIVELA sin miedos aprendiendo a ser tu.

 

Te amo.

 

Abdiel Barranco C.

¿Y tú, te atreves a salir de esa blanca habitación?

PD. Este es el artículo 70 de esta serie, gracias por leerme y compartirlos.


GRACIAS.


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