VIDA, palabra que resuena profundo, cuando intentamos adentrarnos en sus confines, para tratar de darle un para qué, a lo que hacemos, vivimos o sentimos… Todos sus componentes son esenciales, aun cuando no entendamos la importancia de pasar por momentos de dolor, susto, alegría, sentirnos solos, etc. Así es el camino que nos lleva a elevarnos, un día a la vez, sobre aquello que nos enseñaron, vimos o nos obligaron a aprender, aun cuando no sepamos que, buena parte de nuestra sabiduría ya viene con nosotros.
Mucho había leído o escuchado, hasta que llegaron a mi vida las palabras
de Richard Alpert, mejor conocido como Dam Rass – Psicólogo, académico
de la universidad de Harvard, escritor y gurú QEPD, quien por años exploro la CONSCIENCIA
de maneras poco ortodoxas, hasta que en un viaje a la India conoció a quien se
convirtiera en su mentor.
Por eso, mis letras de hoy son un extracto de lo que resonó en mí, de
este personaje que descubrió su papel, en el gran Océano de la vida.
CONOCIENDO EL OCÉANO
Metafóricamente, si nuestra vida, tal cual como la conocemos, fuera un océano
basto y profundo, se torna interesante el solo pensar ¿Qué tanto conozco yo del océano? Desde ese
cuestionamiento, empecé mi búsqueda, para así entender las palabras de Dam Rass,
por lo que saltando las barreras de mí conocimiento, entendí que aparte de las
olas de tormenta o la calma que exista en la superficie, al sumergirnos en el
mismo, aparte de TODAS las especies animales, conocidas o no, también existe
una flora submarina y no solo algas, sino también corales y profundidades que
aun no conocemos… Así como la consciencia
humana.
Esto nos lleva a entender que, en gran mayoría, los humanos apenas
estamos interesados en conocer la superficie de lo que somos, sin tomar en
cuenta el ENORME potencial, habilidades y capacidades que tenemos a lo profundo
del SER. Aquí es importante hacer una
división, ya que:
·
Una cosa es el conocimiento dogmático – Ese que se “adquiere”
con la mente – Ciencia.
·
Y otro MUY DISTINO, es el que se vive desde el Alma –
Espiritualidad.
Esto es importante tenerlo claro ya que, en las profundidades del SER, la
ciencia solo puede intentar esbozar algunas líneas de pensamiento, pero en lo
espiritual entran en juego situaciones que la ciencia no se atreve a explicar.
ALTERANDO LA QUIMICA DEL CEREBRO
Como bien lo explica Mario Alonzo Puig – Medico, cirujano, escritor y
conferencista español – “en los momentos de
tormenta, la amígdala se activa, bloqueando la corteza prefrontal, por lo que
la creatividad o capacidad de solucionar los problemas se anula” Esto, sin entrar en mas detalles fisicoquímicos,
es parte de la explicación de lo que a lo largo de la vida, nos ha IMPIDIDO
avanzar, no solo en la solución de nuestros temas del día a día, sino también
en la posibilidad de adentrarnos en terrenos de la mente y la espiritualidad – Resumiéndolo
a palabras llanas – El miedo nos come y es ahí, en donde empezamos a reaccionar
de manera airada, sin darnos la oportunidad de relajarnos y flotar en ese basto
océano. Es así como la mente nos lleva
a enfermarnos física y emocionalmente, alejándonos de la realidad, para empezar
la construcción de historias como: No sirvo para nada, no le encuentro
sentido a mi vida, nadie me quiere, todo me da igual, yo soy feo, etc. etc.
Esto es una muestra clara y básica, de la importancia de gestionar los
pensamientos y emociones, tema que la mayoría de las personas no pueda o quiera
ver. Es aquí en donde la meditación, el aprender
sobre respiración o el mindfulness, son herramientas altamente comprobadas, que
van mas allá de las explicaciones científicas, que la mayoría cree.
EL MILAGRO DEL AMOR
En este aprender constante, una de las falencias humanas, es entender el
POTENCIAL curativo que tiene el Amor y el Perdón, mismos que obviamente no se
pueden explicar con ecuaciones matemáticas o una Ley Termodinámica, por lo que
espero que con un simple ejemplo pueda explicar mi experiencia con el amor.
Mi padre esta próximo a sus 80 años, él con su amplio conocimiento técnico,
no desarrollo a lo largo de su vida, la habilidad de gestionar sus emociones,
por lo que es un hombre muy silente, poco o nada afectivo y aunque le gusta reírse
de un buen chiste, su risa es como encontrar una perla en ese océano del que
hablamos.
Por muy dura que haya sido su infancia y juventud con mi abuelo, mi
abuela y mis tíos, cuando yo le dije por primera vez que lo amaba, desde ese
día, mi relación con él empezó a cambiar…
Yo siempre lo he respetado, pero tal vez de niño le tenía miedo, pero
hoy, el amor nos ha unido, al punto que me ha contado de lo celosa que era mi
abuela, de la vez que le robo el carro a mi abuelo y me compartió su secreto para
que la comida me quede sabrosa… “El ingrediente secreto es el AMOR”
Esto es ABRIR el corazón para que, entre el amor, el cual cambia el
panorama y de escuchar los truenos y ver el oleaje del embravecido mar, se pueda
distinguir los espacios de nubes blancas o los destellos de sol a lo lejos,
para así relajarnos y aceptar que NO TENEMOS EL CONTRO de la tormenta, pero si
podemos gestionar lo que sentimos.
DESCUBRE EL BUZO QUE HAY EN TI
Neem Karoli Baba – Mentor de Dam Rass – el día que se conocieron, debelo
a Rass, no un sueño, sino una vivencia que este había tenido la noche anterior “Anoche viste las estrellas y recordaste a tu madre recién
fallecida” en ese momento, según explico Rass, “no pude entender,
como yo un catedrático de Harvard, no tenía respuesta a como este hombre, SUPO
lo que yo sentí la noche anterior, estando a 160km de él” por lo que, ni en sus más psicodélicos viajes,
gracias a muchas drogas sintéticas y naturales que en sus experimentos había usado,
se podía explicar aquel acontecimiento, por lo que Karoli Baba le explico “El conocimiento esta en ti” lo cual hizo que Rass empezará a aprender de su
gurú.
Yo he escuchado y leído sobre los conocimientos intrínsecos con los que
cada SER viene a este plano terrenal, pero como llegar a explorarlos o
entenderlos, cuando desde siempre se nos ha repetido “Estudia para ser
alguien – Tienes que ir a la universidad – Debes ser mejor que los demás” y
muchas cosas más, PERO ninguna de esas exigencias familiares o sociales, están
encaminadas al auto descubrimiento, al florecimiento de nuestras verdaderas
capacidades y habilidades o a entendernos a nosotros mismos, por lo que no nos
atrevemos a adentrarnos en el mar del conocimiento.
Aquí es interesante VER los bloqueos mentales que nos cuesta romper,
gracias a las tradiciones o el dogmatismo imperante, el cual nos lleva a creer
que lo que conocemos, es lo único valido para nuestra propia existencia y
entendamos algo, esto lo creen los 8 mil millones de seres, según sus propias
creencias y limitaciones impuestas.
AFORTUNADAMENTE y luego de auto cuestionarnos, podemos acceder a
personas, textos y experiencias que nos permite sumergirnos en ese profundo mar
del conocimiento, la auto consciencia y el más profundo SENTIR de lo que
realmente somos, mas allá de las etiquetas familiares, sociales, culturales,
religiosas o educativas que tengamos.
DIOS ESTÁ EN TI, POR ENDE, TU ERES DIOS
El gran libro de la liberación natural mediante la
comprensión en el estado intermedio, mejor conocido como El Libro Tibetano
de los muertos, ha sido reconocido durante siglos como un clásico de la sabiduría
budista y del pensamiento religioso; este libro, mas que hablar de la
liberación del Alma, para que esta llegue al Nirvana, trata sobre LA VIDA,
para que así nos preparemos para la trascendencia en Paz y Armonía con Dios.
Esto,
mas que distanciarnos de nuestras creencias, nos debe llevar a reflexionar, ya
que en mis experiencias participando o leyendo sobre distintas religiones o
cultos, me percate que el adoctrinamiento esta basado en el temor a Dios, mas
que en reconocer que el amarlo, implica amarnos a nosotros mismos, por lo que, para
amarme, DEBO conocerme y justamente eso es lo que las religiones impiden.
Esta
curiosa realidad, me llevo a entender el papel manipulatorío de las religiones,
ya que no puedo entender, como se me obliga a creer en un Ser Divino, sin
primero aprender a creer en mi mismo, como un Ser Divino, hecho a imagen y semejanza
de Dios, lo que, a todas luces, me hace ser parte VIVA de Dios = Yo soy Dios.
Esto es
hacer CONSCIENCIA de mi papel en esta vida, por lo que más allá de creer en la
palabra dominical, DEBO empezar a creer en mi mismo, ya que Dios puso en mi
todo lo necesario, para ser una persona de bien, cuando dejo de ser tan solo
una gota en el mar y me convierto en un OCÉANO lleno de Amor.
Paz y
Amor.
Abdiel Barranco C.







