domingo, 11 de septiembre de 2022

NO QUIERO TENER HIJOS

 


En el proceso de evolución de nosotros los humanos, un tema que las naciones no pueden dejar por fuera es la natalidad, esta, mas allá de ser manejada solo como un asunto demográfico, ligado originalmente a la defensa o la producción de recursos para los Estados, es mas bien un derecho que cada mujer u hombre puede negar, no como un acto de rebeldía antisistema, sino como lo que es…   Una decisión individual.

Por esto, mas allá de buscar polemizar, Entendí, luego de escuchar a una mujer explicar la vida que llevo su bisabuela, quien pario 18 hijos, lo que busco es dar una mirada MUY disruptiva, a este tema que ha sido por generaciones, una carga emocional para todas aquellas mujeres que a contracorriente de sus familias, amistades y parejas dijeron conscientemente “No quiero tener hijos”.

 

DESDE LAS “SAGRADAS” ESCRITURAS

Para aquellas personas seguidoras o fanáticas religiosas, toda mujer debe cumplir el mandato divino mas allá de sus propios deseos, por lo que el concepto de “La mujer es para parir, educar a sus hijos y cuidar a su marido” se implanto como la norma inquebrantable en muchas civilizaciones, relegando a la mujer a la cocina y la satisfacción del hombre.

Increíblemente, dependiendo de la cultura, esto se sigue dando hasta nuestros días dentro de las culturas del medio y lejano oriente, , etc. y por extraño que parezca, en casi todas las culturas la sopeteada pregunta ¿Y tú no vas a tener hijos? sigue siendo incómoda para muchas mujeres, por lo que sonríen entre dientes inventándose cualquier excusa para salir del paso, repitiendo para sus adentros “Carajo por qué siempre la misma pregunta”.  

Obvio, si la conversación es entre pares generacionales la respuesta sería ¿Tú me los vas a mantener? pero si es con adultos mayores, el respeto casi siempre se impone, por lo que la sonrisita cajonera es acompañada de Abuela, que cosas tiene usted.

 

Y LLEGARON LAS MINIFALDAS

Seguro no los conoces, pero John Rock y Gregory Pincus, ambos vinculados a la Universidad de Harvard, en 1955 desarrollaron la primera pastilla anticonceptiva, la cual dio paso en 1960 a la liberación sexual de muchas mujeres, mismas que tomaron en sus manos su placer, mas allá de ser solo maquinas de reproducción.    Este es un parteaguas, justo en una convulsa década en donde muchos movimientos exigían DERECHOS para las masas oprimidas por el Estado, las creencias religiosas y la cultura impuesta.

Desde ese punto se podría creer que el resto es historia, pero la cosa no ha sido tan fácil, ya que temas como el aborto, la eutanasia, el trabajo remoto o el autoempleo siguen generando roncha aquí y allá, gracias a esquemas rígidos, que se reúsan a ser cambiados, por individuos y sociedades.    


VOLVAMOS A LA BISABUELA

A inicios del siglo pasado y hacía atrás, era extraño ver a una familia de 3 o 4 integrantes, ya que la creencia era que los hijos varones ayudaban en las tareas del campo y las niñas en la casa, motivo por el cual había que asegurar mano de obra para el duro trabajo en el campo, aparte que cuando el bisabuelo se daba sus copetines, llegaba a la casa con ganas de cama y un poquito más.

Fue así como la bisabuela podía en un año, tener un parto en enero y otro en diciembre, llegando a los 40 años con 20 hijos y 3 perdidas.   El tema era tal que, con múltiples partos, la desconexión emocional llevo a esta mujer, a sentir un dolor en el vientre, por lo que detrás de la casa se puso en cuclillas y entre un poco de sangre, vio un feto de pocas semanas, por lo que ahí mismo lo enterró y se fue a tender la ropa.

Esto por impactante que parezca, crea una cadena generacional que tarde o temprano, llegará a un eslabón rebelde, que rompe el ciclo, como muestra de independencia y amor propio, mas allá de la lealtad a su clan familiar.

 

“LAS OVEJAS NEGRAS”

Al explorar el sentir de muchos Seres (Hombres y mujeres por igual), me he dado cuenta de que los estigmatizados con el titulo de ovejas negras, mas que ser rebeldes sin causa, son los enviados por Dios o el Universo para romper vínculos tóxicos y de dolor dentro de la familia, que generacional y energéticamente vienen afectando a tantas personas, sin estas tener el conocimiento o la VALENTIA de descubrir su verdad y VIVIR según sus parámetros y no los del “deber” familiar o social.

Es ahí en donde la misma familia se pone en contra de esta oveja descarriada, tachándola de inconsciente e inmadura, llegando al chantaje emocional con frases como Y no me vas a hacer abuela”, “Yo quiero que mi nieto lleve mi nombre” o la típica frase “Te va a dejar el tren”     CARAJO, siento que como sociedad somos tan inmaduros y metiches, ya que, si una mujer o un hombre no desea tener hijos, esa es su decisión y nadie debería opinar al respecto, ni preguntar razones.

Y sí, acepto que la paternidad es la bendición mas hermosa que he recibido, pero ¿Quién soy yo para imponerle a mi hija, mi hermana, mis primas o mis amigas, el DEBER de traer un Ser a este mundo?

 

NO SE SI SERÉ ABUELO

Esta es una realidad, pero mas que desear Ser abuelo, deseo que mi hija sea feliz, que viaje y disfrute de todas las maravillas que este mundo tiene para ella, así como para todas aquellas personas, hombres o mujeres que hoy, siguen recibiendo esa presión, como si un Ser no pueda lograr el Éxito o la Paz Interior sin dejar descendencia o una semillita más, para este mundo plagado de Seres que viven según las normas y patrones de los demás, sin llegar a conocerse a si mismos, por lo que mas que hijos de sus padres, siguen siendo esclavos de creencias, manteniendo mitos y tabúes, defendiendo ideologías absurdas o irrespetándose dejando su propia HONESTIDAD de lado…   Y bueno, si tu eres feliz así, bien por ti.

Por eso, mujer u hombre, si no quieres tener hijos, te deseo que seas feliz y disfrutes tu vida, sin dejar que nada ni nadie te cuarte tu deseo de ser LIBRE.

 

Paz y Amor

 

Abdiel Barranco C.

La Aventura de VIVIR  

2 comentarios:

  1. Tema controversial. Mi comentario, enmarcado en los tiempos de ahora de familas mucho menos numerosas, total de control de la natalidad y mujeres estudiadas y empoderadas, es que tanto hombres y mujeres que dicen "no voy a tener hijos" sólo piensan en el momento actual olvidando que llegará un momento en que no se podrán limpiar el q, como un bebe. Y entonces, ¿quién los va a atender? ¿Quién les dará cariño y afecto? Y esa última es una medicina q de viejos todos necesitaremos y esa no se consigue en ninguna farmacia del mundo.

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