Más iguales que nunca

 

Hoy cuando las diferencias no son por lo que tienes o por lo que enseñas en redes, la realidad nos está enseñando que TODO lo que planeaste, rediseñaste e inclusive aprendiste en 2020, no sirve para mucho en este nuevo amanecer.

 

Las reglas del juego se están reescribiendo sobre nubes oscuras y no es por ser pesimista, pero la visión de la mayoría de la población global no es de 20/20.

 

Por cercano que esté el futuro, lo correcto es planear para un día, no para una semana, ya que hoy estas, mañana cambian otra vez las reglas y tus planes se transforman en frustración, miedo e inseguridad.

 

Por ende, te duermes y levantas con tu zapato rojo, ya que estamos viviendo el día de la marmota y nadie sabe cuándo terminará, aunque el bitcoin este a reventarse, cual burbuja de especulación.

 

Sí, se siente un aroma a anarquía y no me importa, oh sacrilegio, pero ¿Comunismo te suena mejor?

 

Ya no hay teoría que valga, todos dudamos hasta de las sombras en casa y pobre si tienes a Siri o Alexa; las redes nos doblegan con fake news, los políticos repiten muy bien su misión, mentir y a los científicos, a esos les hacemos el mismo caso que al planeta.

 

No pidas fuego, que baje Dios o Jehová, ellos ya estuvieron aquí y nos fuimos de parranda, a gritar gol, coquetear con el celular o a jugar al casino... NO es triste, es real, pero así estamos de distraídos y dormidos.

 

Por ende, ya vendrá la Computadora que Gobierne al GRAN Estado; el espejo negro será más real que nunca, tu comida será 100% sintética, tu celular pensara por ti y serás una batería más de esta Matrix y vaya que si nos advirtieron y como siempre, lo vimos como una película de ciencia ficción.

 

Migrar a otras tierras no marcará una diferencia, ya que este virus global no es científico, más bien económico y se alimenta del poder, creando miseria donde hubo paz, exprimiendo cerebros, colocando memes, diversión y distracción.   Tik Tok, Tik Tok.

 

Huye a las montañas o a donde el Internet no te vea, recuerda hay un lugar, tan viejo como la humanidad, donde estarás seguro, sin miedos y saludable.

 

Lo mejor, no tendrás que abordar un Spacex o pagar millones para vivir ahí, pero se requiere SER valiente para caminar hasta ese lugar sagrado, ya que, como todo lugar especial, requieres abandonar viejas costumbres, dejarte guiar por tu intuición y aceptar que muchas cosas que creíste ciertas, pues no lo son.

 

Ese lugar es tu YO interno, tu SER, tu esencia; cuando lo encuentres sabrás que el esfuerzo, por mucho que te haya tomado, rindió frutos de paz, libertad y amor.       Tú lo puedes lograr.

 

La verdad no hay mejor esperanza que creer en uno mismo cuando todo parece desmoronarse, por eso AMATE, di lo que sientes con sinceridad, aférrate a la vida, suelta las amarras sociales y mediáticas que te tienen esclavo de una “realidad” que no te mereces, ya que no hay mejor mañana que el hoy.

 

En fin, solo tienes dos opciones. La píldora azul (Miedo, ego, mas de lo mismo) o la roja (Crecimiento, paz y amor), tú decides que hacer en este momento, en donde somos más iguales que nunca, aunque no lo creas.

 

Abdiel Barranco C.

PD. Si cambias tu manera de pensar, cambia todo.